Lograr que un niño en edad preescolar mantenga la atención puede ser un desafío, pero con las estrategias adecuadas, puedes ayudar a tu hijo a desarrollar mejores habilidades de concentración. Aquí tienes siete consejos útiles
- Crea rutinas consistentes: Establecer una rutina diaria proporciona estructura y seguridad. Cuando los niños saben qué esperar y cuándo, es más fácil que se concentren en las tareas. Asegúrate de que las actividades clave, como comer, jugar y dormir, ocurran a la misma hora cada día.
- Reduce las distracciones: Minimiza los ruidos y estímulos visuales en el entorno donde tu hijo realiza actividades que requieren concentración, como leer, dibujar o hacer tareas. Un espacio tranquilo y ordenado facilita que el niño se enfoque mejor en una sola actividad.
- Divide las tareas en pasos pequeños: Los niños pequeños pueden sentirse abrumados con tareas grandes. Divide las actividades en pasos más pequeños y manejables. Esto no solo hace que las tareas sean más accesibles, sino que también les da una sensación de logro al completar cada paso.
- Incorpora pausas y movimientos: Los niños en edad preescolar tienen mucha energía y necesitan moverse. Incorpora pausas regulares durante actividades que requieran concentración. Unos minutos de juego activo pueden ayudar a “resetear” su atención y prepararlos para volver a enfocarse.
- Usa juegos para mejorar la atención: Juegos como “Simón dice” o actividades de memoria son excelentes para mejorar la atención de los niños. Estas actividades son divertidas y, al mismo tiempo, enseñan habilidades de escucha y concentración.
- Haz que la actividad sea interesante: La motivación es clave para mantener la atención. Encuentra maneras de hacer que las tareas sean más atractivas para tu hijo, ya sea incorporando sus intereses, utilizando colores llamativos o añadiendo elementos lúdicos que mantengan su interés.
- Dales reconocimiento positivo: Reforzar el comportamiento positivo puede motivar a tu hijo a concentrarse. Reconoce y celebra cuando logre completar una tarea o mantener la atención durante más tiempo de lo habitual.
La atención en los niños preescolares es una habilidad que se desarrolla con el tiempo y la práctica. Aplicando estos consejos y siendo paciente, ayudarás a tu hijo a mejorar su capacidad de concentración, lo que beneficiará su aprendizaje y desarrollo general.